La limpieza de cutis profunda ayuda a remover las células muertas superficiales de la piel, a corregir los poros dilatados y mejorar el aspecto de ésta.
Una limpieza facial profunda es una gran manera de mantener tu piel con aspecto joven y saludable. Además, es imprescindible antes de cualquier procedimiento de hidratación facial o aparatología, puesto que favorece la absorción de los nutrientes y activos de cremas y ultrasonidos que solamente serán beneficiosos si adentran profundamente en la piel. Con ello, mejoramos la producción de colágeno y elasticidad del rostro, ya que es mucho más fácil en una piel libre de toxinas, suciedad y células muertas.
Nuestros cuidados o descuidos pasan factura a nuestra piel con el paso de los años. A veces, por más que nos apliquemos en nuestra rutina facial, la piel necesita estar limpia para absorber los principios activos de las ampollas y cremas hidratantes. La limpieza de cutis es un gran respiro para la piel, y aún más si padecemos de acné o eccemas.
Sin dudarlo, necesitas tener cuidados extras, ya que el sol y el maquillaje podrían exacerbar esas condiciones.